Ruta a pie junto al lago desde la estación hasta el castillo y dónde comer los mejores kibinai
Trakai es, quizás, el tesoro medieval mejor valorado por los propios lituanos.
Seguramente lo es, por la importancia que tiene su castillo en el nacimiento de la nación de Lituania, pero también, por el maravilloso entorno donde está ubicado.
No en vano estamos en el Parque Nacional Histórico de Trakai, declarado así por su historia y también por su entorno paisagístico, en donde destacan sus más de 200 lagos.
Con esta carta de presentación, si teníais dudas, ahora ya tendréis claro que vale la pena ir a Trakai.

Cómo llegar a Trakai desde Vilnius: tren rápido y barato y ruta a pie al castillo
A tan solo media hora desde Vilnius y con muchos horarios donde elegir, ir a Trakai en tren es muy fácil y muy barato (3 euritos de nada).

Aquí os dejamos el link para ver horarios y comprar los billetes del tren:
Para más info sobre Vilnius, visitar en nuestro blog: Qué ver en Vilnius en dos días
Pero eso si, la caminata desde la estación de Trakai hasta el castillo es de aproximadamente una horita…pero vaya caminata!!!
Recomendamos encarecidamente que, para llegar de la estación al castillo, no cojáis ni taxis ni autobuses, ya que os perderéis lo mejor de toda esta escapada, que es el camino que lleva al castillo.
De hecho, no os ponemos ningún link, para evitar malas tentaciones…
Castillo de Trakai: recorrido interior, paseo por sus alrededores, tiendas de souvenirs y restaurantes
El camino discurre a lo largo de un lago, justo el mismo en el que está la isla donde está ubicado el castillo.

El sitio es increible: hay parques infantiles, bancos idílicos, alquiler de barcas, pequeños bares con terracitas donde tomar algo…un lugar de ensueño.

Y finalmente, sin casi darse uno cuenta, se llega al Castillo de Trakai, y aquí es donde cambió la cosa.
Efectivamente, comprobamos, en persona, que Trakai es un destino turístico de primer orden.
A medida que íbamos llegando al castillo, iban apareciendo restaurantes de grandes terrazas, tiendas de souvenirs (hay más aquí que en el resto de Lituania), y sobre todo barcas, canoas y patines de alquiler (hay tantos que si salieran a la vez no se vería el agua del lago).
Y también hay gente que son descargadas como ganado de los autocares: Allá ellos! Se perdidieron lo mejor de Trakai, su camino.
Dejando atrás a los turistas hambrientos de empanadillas y souvenirs, nos fuimos a ver el Castillo de Trakai que, sin duda, es precioso.
La entrada es un poco cara, pero nos supo mal no entrar, aunque sabíamos de antemano lo que allí íbamos a encontrar (vasijas, espadas, lanzas, cuberterías, fotos del conde de turno, etc).
Seamos sinceros, las exposiciones de dentro de los castillos son todas iguales y, nosotros siempre recomendamos evitarlas, a no ser que se sea un experto en el tema, que, también los debe haber, que lo deben disfrutar.
Pero vale la pena entrar en el Castillo de Trakai? Pues la verdad es que sí, ya que por dentro era precioso, en especial su patio interior, con sus galerías recorriéndolo de arriba a abajo.

Info sobre horarios y precios en:
Al acabar la visita y, ya con mucha hambre, no pudimos evitar mezclarnos con el ganado de los autocares y dirigirnos a comer a uno de los muchos resturantes de la zona.
Dónde comer en Trakai y probar los famosos kibinai
Nosotros fuimos y recomendamos el Restaurante Kybynlar
Nos gustaron mucho unas empanadas típicas de Lituania (los Kibinai), rellenas de diferentes carnes.

Estas empanadas tienen su origen en Turquía.
Una tribu de allí (los karaítas) las trajeron hace muchos años y hoy en día son uno de los más famosos manjares de Lituania.
Los postres también fueron un espectáculo, basados, también, en las empanadas del kirinai.

Satisfechos de nuestra excursión para ver Trakai, regresamos, otra vez en tren, a Vilnius.


