Viaje en tren desde Barcelona para recorrer a pie la costa entre Saint-Jean-de-Luz y San Sebastián
Este viaje, que hoy proponemos, está destinado a todos aquellos a los que os gusta caminar por paisajes de ensueño y disfrutar de la buena gastronomía que un país, como Euskadi, os puede ofrecer.
Así que, poneros el chubasquero, calzaros las botas y a por el Camino del Norte!!!
Día 1 – Cómo ir de Barcelona a San Sebastián: mejor combinación en tren y autobús (y nuestro horario recomendado)
Aunque hay un tren directo al día que va de:

nosotros optamos por llegar un poco antes a Donostia y poder organizar el avituallamiento del viaje ese mismo día, dicho de forma más simple, poder ir al supermercado, antes de que cerraran.
La combinación elegida, en esta ocasión, fue en tren hasta Pamplona y de allí en autobús hasta Donostia.
Y, además, esto nos permitió comer en Pamplona, que siempre es un placer y que os recomendamos, sin duda, hacer.
Los horarios que elegimos, para aprovechar al máximo la jornada, son:

Estos billetes tienen un coste variable de entre 40 y 60 euros por persona, dependiendo del día y de la antelación con la que se compren, y los podéis comprar en la web o App de RENFE.
Los billetes de autobús entre Pamplona y San Sebastián son más baratos, ya que cuestan menos de 10 euros. Además, podemos comprarlos para cualquiera de los muchos horarios disponibles a lo largo del día (la frecuencia es de aproximadamente un autobús por hora).
Nosotros, para tener tiempo de comer en Pamplona, y poder ir a comprar al supermercado en San Sebastián, recomendamos este horario:

Para otros planes encontraréis más horarios en la web de ALSA.
Y para comer en Pamplona recomendamos un pequeño bar que hay junto a la estación de tren, con buenos y enormes bocadillos y platos combinados de productos de la tierra: Bar La Musería.
Y ya en Donostia, para dormir, recomendamos los abba Apartments Playa de Gros, enormes y modernos apartamentos, en una zona muy tranquila y muy bien comunicada de la capital guipuzcoana.

Día 2 – Ruta a pie de Saint-Jean-de-Luz a Hondarribia (14 km)
Para dirigirnos desde nuestro apartamento en el barrio de Gros de Donostia a Saint-Jean-de-Luz (Donibane Lohizune en euskera), disfrutamos de lo lindo, como buenos treneros viajeros, combinando diferentes medios de transporte sobre raíles.
Nos dirigimos a pie hasta la estación de Amara-Donostia de los ferrocarriles vascos, los llamados aquí: EUSKOTREN.

Cada media hora salen trenes (de la línea E2) con destino a Hendaya (Hendaia en euskera), ya en territorio de Francia.
Y el coste del billete sencillo (el que usamos) para este trayecto es de 2.90 euros.
Una vez en Hendaya, se camina unos pocos metros y se coge el tren francés de la SNCF que nos lleva hasta la estación de Saint-Jean-de-Luz-Ciboure, por unos 4 euros, y en tan solo 11 minutos.
Como la frecuencia es de tren por hora, no os pondremos ningún horario recomendado, aunque recomendamos salir de Donostia temprano para aprovechar bien el día.

La ruta que haremos hoy es completamente llana y tiene solo 14 km. Se puede hacer sin problema en una mañana, como hicimos nosotros, y así llegar a Hondarribia a la hora de comer, que siempre es un placer.
Lo mejor del recorrido son las vistas al Atlántico desde la Carretera de La Corniche (que seguimos de principio a fin) y el enorme arenal de la Playa de Hendaya, con su precioso Boulevard de la Mer.



La sorpresa nos espera al final de la etapa: el cruce del río Bidasoa para regresar a España, a bordo de uno de esos barcos tan propios de esta costa, tan baratos (solo 2.50 euros por persona) y tan fascinantes para los mediterráneos como nosotros.
Para más info sobre el Bateau Marie-Louise, que así se llama el barco, consultar esta web:

En Hondarribia, donde los precios de la restauración suelen picar bastante, elegimos para comer un estupendo bar de menú del día, abundante y casero (el Restaurante Maitane).
Lamentablemente, ya no podemos recomendarlo porque cerró hace unas semanas, dejándonos huérfanos a quienes disfrutamos comiendo bien por poco dinero.
Y es que, aunque en Hondarribia se come de maravilla, hoy en día es prácticamente imposible encontrar sitios así.
La vuelta a Donostia la hicimos en tren desde la estación de la Renfe de Irún, alargando el paseo unos kilómetros más para bajar la comida.
Los horarios de trenes los tenéis en el siguiente link:

Y para acabar el día, os dejamos el track de la ruta de hoy:
RUTA SAINT-JEAN-DE-LUZ – HONDARRIBIA 14 KM
Día 3 – Ruta a pie de Hondarribia a Pasaia (16 km)
La ruta de hoy comienza exactamente donde la dejamos ayer: en Hondarribia.
Para llegar hasta allí, salimos temprano desde nuestro apartamento en Donostia y nos subimos al autobús E21 de EKIALDEBUS, una línea muy práctica que conecta la ciudad con el aeropuerto y con Hondarribia.
Si necesitáis consultar horarios o buscar otras líneas de los autobuses interurbanos de Donostia, podéis hacerlo en la web de EKIALDEBUS

La ruta de hoy transcurre por paisajes bellísimos y a la vez solitarios ya que cruzamos el mítico Monte Jaizkibel de un extremo a otro.
Es por esto que hoy toca comer bocadillo en la ruta, y ya por la noche nos daremos un homenaje yendo de pinchos por la parte vieja de San Sebastián.
De la larguísima ruta de hoy destacamos las vistas desde lo alto de Jaizkibel, el Santuario de Guadalupe y la fascinante bajada hacia el mar llegando finalmente a Pasaia.

Como en la etapa de ayer, al final, tendremos que cruzar en barco para pasar de Pasai Donibane (Pasajes de San Juan en castellano) a Pasai San Pedro (Pasajes de San Pedro en castellano).
El barco que cruza el puerto de Pasaia, llamado popularmente La Motora, cuesta unos dos euros y es un viaje al pasado que vale la pena disfrutar, aunque en un par de minutos se acabe…


Pasaia esconde muchas sorpresas. Una de ellas: aquí nació el famoso modisto Paco Rabanne, cuyo verdadero nombre era Francisco Rabaneda Cuervo. Si tenéis algo de tiempo, merece la pena descubrirlas:
No podéis dejar de ver lo más imprescindible de Pasai Donibane: la Plaza de Santiago, pegada al agua, con sus casas de colores y sus bares y restaurantes donde sirven pescado del bueno.


O en Pasai San Pedro, visitar la Albaola Itsas Kultur Faktoria (Albaola Factoria Marítima Vasca en castellano), interesantísimo (aunque un poco caro) museo marítimo, donde podréis ver la construcción, en vivo, de un barco ballenero.
Una vez visto todo esto, regresamos a Donosti en autobús (línea E07 de EKIALDEBUS), ya dispuestos para ir a cenar unos pintxos por la parte vieja de Donostia
Aunque de bares de pintxos en Donostia hay muchos y casi todos extraordinarios, nosotros os queremos recomendar un par de sitios interesantes:
Bartolo Etxea, un clásico de la parte vieja de Donostia, con buenos pintxos clásicos y siempre a rebentar de gente.
Bare Bare Jatetxea, nuestro preferido en Donostia, con pintxos modernos y un ambiente mucho más relajado.

Para acabar el día, y como siempre, os adjuntamos el track de la ruta de hoy:
RUTA HONDARRIBIA – PASAIA 16 KM
Día 4 – Ruta a pie de Pasaia a Donostia (9 km), comida en sidrería y viaje en autobús a Pamplona
La ruta de hoy es muy cortita, lo justo para llegar hasta Donostia, comer en una sidrería (imprescindible en Gipuzkoa) e iniciar nuestro regreso a Barcelona, haciendo antes una parada en Pamplona, donde dormiremos.
Para llegar a Pasaia, nuevamente tomamos nuevamente el autobús de la línea E07 de EKIALDEBUS, dirección a Pasaia.
La ruta de hoy tiene dos partes muy distintas. La primera es una maravilla: un sendero solitario que se adentra en un bosque situado sobre un acantilado, desde donde se disfrutan unas vistas espectaculares del Atlántico.

La segunda parte del camino, en cambio, es menos inspiradora: un tramo largo y bastante monótono que discurre por el entorno urbano de San Sebastián.
Por suerte, en mitad de esta parte más tediosa hicimos una parada que lo compensa todo: una comida en una sidrería, uno de esos imprescindibles de Euskadi que siempre te arreglan el día.
Justo al entrar en Donostia, por el barrio de Intxaurrondo, está la Sidrería Intxaurrondo, que por fuera no es gran cosa, pero por dentro es otra…

Aunque no tiene el encanto de las sidrerías rurales, este templo gastronómico de primer orden ofrece la mejor tortilla de bacalao que hemos probado nunca, y un extraordinario txuletón que la va a la zaga.


Y si le sumamos el encanto de las cinco kupelas (toneles) con diferentes variedades de sidra, y el ritual de ir a servirse, pues ya tenemos uno de los momentos más memorables de nuestro viaje a la província de Gipuzkoa.
Finalizada nuestra opípara comida, caminamos los últimos metros hasta el apartamento para recoger el equipaje.
Desde allí pusimos rumbo a la estación de autobuses, en donde cogimos el autocar hacia Pamplona, ciudad en la que pasamos la noche.
Como a la ida, podéis consultar en la web de ALSA el horario que mejor se adapte a vuestras necesidades viajeras.
Y aquí podéis consultar el track de la mini-ruta de 9 km. que hemos hecho hoy:

Como llegamos un poco tarde a Pamplona, comimos cualquier cosa de camino al hotel, y es por esto que no os recomendamos ningún sitio para cenar, pero de haberlos, los hay, y muchos, y muy buenos…
Sí que os recomendaremos, en cambio, el hotel en el que estuvimos: el Hotel Pamplona Catedral, muy céntrico y relativamente cercano a la estación de tren (por cierto, bastante apartada del centro), donde hasta allí nos dirigiremos, al día siguiente, a primera hora, para tomar el tren de regreso a Barcelona.”
Día 5 – Regreso en tren de Pamplona a Barcelona
Solamente hay dos trenes directos que van de Pamplona a Barcelona cada día:


En el caso de que tengáis tiempo y queráis visitar Pamplona y comer bien (que aquí siempre es lo que sucede), os recomendamos el tren de la tarde.
En nuestro caso, y en esta ocasión, cogimos el tren de la mañana, lo que nos dio la oportunidad de descubrir un buen lugar donde desayunar, camino de la estación.
Y, cómo no, queremos recomendaros (por última vez en este artículo, lo prometemos) este sitio, por si fuera menester:
Ogi Berri La Casa del Río
Una panadería-degustación, de esas que están ahora tan de moda, que abre temprano, y dónde todo está buenísimo.


